Este grito y título del primer panfleto de Stéphane Hessen ha hecho eco, ha logrado que la juventud en toda Europa y África salga de su indiferencia y desidia ante el mundo que están heredando. Ha levantado sus voces y los ha lanzado a las calles a protestar. No es para menos: en Europa los derechos que sus padres y abuelos lograron luego de dos guerras mundiales y millones de muertos, se ven mermados por una clase política no rendida ante el interés común pero si ante el interés económico de unos cuantos. En África, solo han abierto los ojos y han visto que sus dictadores llevan décadas haciéndose más y más ricos mientras ellos viven en la pobreza. Yo lo he leído, y aunque su efecto en mi no ha sido el habitual, -yo hace mucho estoy indignada-, en cambio me ha planteado una incógnita: qué pasa en América?... Cuántos ejemplares de este libro se han vendido?... Por qué América no se indigna si le sobran motivos?... Estará muy buena la telenovela del momento? o será que nuestros pueblos son incapaces porque para indignarse debe vulnerarse la dignidad, cosa que los millones de pobres de nuestros países nunca han conocido?. Y el resto?, Miedo?, Apatía?, Desesperanza?...
Si existen personas con algo de sentido común, con algo de ética y conciencia del bienestar del que debe gozar cualquier ser humano, les pido que intenten hacer de sus países lugares mejores. Nosotros, americanos, revolucionarios por naturaleza hemos visto a nuestras guerrillas desaparecer o corromperse. Es hora de que el ciudadano común, sin armas, sin violencia (de la que estamos hartos!), salga pacíficamente a protestar, a pedir lo que la mayoría nunca ha tenido, un país con empleo y oportunidades, con educación de calidad, donde la gente no muera de hambre en las calles, donde los políticos no se repartan nuestros impuestos y los recursos de todos, ciudades donde no tengamos miedo al anochecer, donde ser ladrón, narcotraficante o sicario estén en la lista de profesiones, un país donde NO secuestren a nadie, un país en el que no tenga miedo a hablar, un PAÍS DONDE SE RESPETE LA VIDA!, un país donde nuestros dirigentes trabajen para nuestro bienestar y no para el de los más ricos, en suma, un país donde TODOS, sin excepción, podamos vivir (NO sobrevivir) y envejecer con dignidad... la lista de demandas es interminable...vamos!, motivos tenemos de sobra... menos que los Árabes, más que Europa, América, donde estamos nosotros?... esto es un llamado a la conciencia colectiva, no a la lucha... miremos nuestro reflejo como sociedad en un espejo... nos gusta?
Decir América, es decir mucho América, ya que incluye desde la riqueza de países como Estados Unidos, Canadá o Chile, hasta la miseria de Haití o Bolivia. En todos estos países hay motivos de "indignación", ya sean ricos o pobres, y habiendo motivos, la indignación surgirá, desde Alaska hasta Tierra del Fuego, pues el pueblo no es tonto ni inconsciente. Tiempo al tiempo, estamos en una lucha de siglos que transciende las fronteras generacionales y aun falta mucho...
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